domingo, 12 de junio de 2016

Serias infracciones del Tratado de la Convención de Ginebra para refugiados de 1951 en el caso de Gregorian Bivolaru



Texto extraido de la pagina de la Organización para los Derechos Humanos Soteria Internacional

(http://www.soteriainternational.org/)


Francia permite la persecución continua de Bivolaru por las autoridades rumanas.
Las ambiguedades en la legislación de la UE con respecto al estado de refugiados llevan a abusos que atentan contra los principios fundamentales de la democracia europea, tal como se ilustra en la convención de Ginebra de 1951. El caso del refugiado rumano Gregorian Bivolaru expone este tipo de errores peligrosos.
Gregorian Bivolaru, ciudadano rumano, obtuvo asilo político en suecia en enero de 2006, le fue concedido por la Suprema Corte de Suecia que consideró que el refugiado “no recibiría un juicio justo y que su vida correría peligro en Rumania debido a sus creencias políticas y religiosas”
En febrero de 2016 Gregorian Bivolaru fue arrestado en Francia, siguiento un Pedido de Arresto Europeo (EAW) mandado por las autoridades rumanas en junio de 2013. La orden de detención europea es una continuación directa de las persecuciones por las cuales se le ha concedido el asilo.
Debido a que el marco de la Orden de Arresto europeo (EAW) no considera la posibilidad de asilo politico entre estados miembros de la UE, esta falla en el marco de EAW parece dar paso a la violación de los derechos fundamentales.
El 8 de junio de 2016 la Corte de Apelaciones de Paris decidió entregar al Sr. Bivolaru a una persecución constante en Rumania, sin tener en cuenta la protección de refugiado de acuerdo a la Convención de Ginebra de 1951.
La posicion de Suecia presentada en la Corte de apelaciones de Paris no deja espacio para la interpretación: Suecia considera que la condicion de refugiado politico del Sr. Gregorian Bivolaru es y sigue siendo justificada. Suecia se mantiene firme su posición de dar asilo al refugiado y no considera la revocación de la protección ante la persecución rumana, aunque Rumania sea ahora parte de la UE.
Nunca hubo ninguna razón para que el Sr. Bivolaru fuera encarcelado. Aun asi, parece que Francia da mas credibilidad a Rumania que a Suecia. El jefe de la policia francesa expresa publicamente opiniones sesgadas sobre el caso; el fiscal realizó preguntas sin chequear la información; no se preparó antes de la detención; la presión sobre el Sr. Bivolaru en la prisión y la forma en que los medios de prensa de Francia presentan unilateralmente el caso se suman a la continuación de la misma persecución que el refugiado ha sufrido en su país de orígen desde el regimen comunista.
El trato del caso de tal manera es en desacuerdo también con la credibilidad de Suecia en una desición inequívoca que ha resultado de una investigación exhaustiva.

El refugiado ha estado ahora en prisión durante tres meses y medio en Francia, con contacto diario con peligrosos criminales, y por la desición que ha sido tomada en estos dias el permanecerá en prisión durante la fase de apelación.
 - La desición de Francia viola el principio de no devolución, la base misma del asilo como tal.
- El Sr. Gregorian Bivolaru es un refugiado político en Suecia desición tomada por 5 jueces de la Suprema Corte sueca en acuerdo con el articulo 1 de la Convención de Ginebra. Este estatus debe ser respetado por todos los estados que han firmado la Convención de Ginebra, incluyendo Rumania y Francia.
- La orden de detención europea se emite en el mismo caso que fue juzgado y planteado por el Tribunal Supremo de Suecia. Europol está obligado a aceptar el asilo dado.
 - La orden de detención europea emitida por Rumania contiene información errónea, con el fin de que Europol le diera prioridad. Este es un abuso grave y deliberado que convierte la orden de arresto nula y que muestra el aspecto político de la persecución.
El refugiado fue arrestado luego de que su nombre apareciera erroneamente en la lista de “Los mas buscados” de Europol. El Sr. Bivolaru no es un fugitivo, sino un refugiado con residencia permanente en Suecia, y poner su nombre en esta lista es una violación es si misma.
Tenemos esperanzas fuertes de que en la fase de apelación, las autoridades francesas van a considerar de un modo cuidadoso los derechos de los refugiados y los tratados internacionales firmados.

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