Fuente: www.yogaesoteric.com
La INTOXICACIÓN es una táctica de desinformación que tiene sus orígenes en el dominio militar – que simplemente significa la difusión de información falsa al enemigo, para derrotarlo y para hacer imposible que adivine la estrategia que tiene en su propio campo. Si sin embargo se ha escapado alguna información real, la intoxicación implica que se difunda cuanto más informaciones diferentes, aun contradictorias, para que el enemigo ya no entienda nada.
LA extensión en el dominio de los medios de comunicación, la desinformación del público a través de la intoxicación mediática significa que se difunda un número muy grande de artículos, emisiones, transmisiones, informaciones sobre algún tema específico. No es realmente necesario que todos estos sean coherentes en su contenido. Lo importante es que se genere confusión, eventualmente una reacción emocional de cierto tipo (por ejemplo odio, miedo o rechazo)
En última instancia la intoxicación tiene la intención de confundir la opinión pública y de anestesiarla con respecto a un tema específico. Las personas luego están saciadas del tema respectivo. Ya no les interesa entenderlo, hablar, pensar o actuar.
En un análisis atento, nos damos cuenta que hoy en día asistimos a una campaña de intoxicación con el tema MISA - Gregorian Bivolaru, teniendo en cuenta el gran número de artículos e informaciones publicadas sobre este tema. Estos artículos cubren una gran gama de temáticas y formula diversas acusaciones dirigidas a Gregorian Bivolaru, abriendo discusiones de todo tipo de hechos ilegales, inmorales o escandalosos.
Indicios claros de que se trata de INTOXICACIÓN
El primer indicio de que se trata de una campaña de desinformación e intoxicación de la opinión pública es el gran número de transmisiones y artículos sobre este tema, que no tiene relación directa con los eventos.
La variedad de informaciones publicadas incluyendo el hecho de que algunas son contradictorias, es otro indicio importante. Para la prensa no importa de lo que sería culpable Gregorian Bivolaru, sino solamente que sea culpable. Si existiera una NOTICIA real, la prensa se enfocaría sobre ella.
Otro indicio: si las acusaciones formuladas contra Gregorian Bivolaru tuvieran una base real, , se haría referencia a fechas, datos precisos y coyunturas precisas, habría pruebas y testigos. Nada de todo esto es presente.
Otro claro indicio de que se trata de una campaña de intoxicar la opinión pública: el mantenimiento de la campaña, aun si no existe ningún hecho nuevo. Se habla de hechos que ocurrieron en algún momento en el pasado poco claro. No hay noticias reales sucediendo ahora. Desde el punto de vista de la prensa, la semana anterior ya es historia antigua. Porqué se mantiene en discusión todo tipo de cosas viejas, sobre las cuales se habla miles de horas?
Y otro indicio importante: la ausencia del punto de vista de quien es incriminado. Esto muestra que de hecho, los periodistas no están interesados de documentar los hechos y de descubrir la verdad.
Cinco preguntas, cinco respuestas, una noticia.
De un modo normal, una NOTICIA sobre un tema dado debe ser actual y de interés público. Una noticia bien escrita responde a cinco preguntas importantes: Quien? Qué? (ha hecho) Cuando? Dónde? Cómo? (eventualmente, si es posible y se realiza un análisis más amplio se podría responder también “Porque?”)
Si pasamos por la mayoría de la información sobre Gregorian Bivolaru descubrimos que hay una carencia de elementos esenciales en algunos artículos. Son presentados hechos insuficientemente documentados, sobre los cuales no se da ninguna evidencia real. Estos hechos no son ni siquiera actuales, ni de interés público. Y las noticias no responden claro a las preguntas anteriormente presentadas, con excepción de la primera pregunta.
Las cinco preguntas y respuestas parecen ser – en esta campaña mediática- de la siguiente manera:
Quién? Gregorian Bivolaru (y eventualmente otros yoguis).
Qué? Cualquier cosa puede ser imaginada. Que tiene una connotación sexual.
Cuando? No se sabe.
Dónde? No se sabe.
Cómo? Del modo más escandaloso posible!
Que hay de los testigos?
Para enmascarar la falta de credibilidad y de información real, los materiales que esta campaña de desinformación usan a los asi llamados testigos. En el caso MISA- Bivolaru, los testigos de la prensa no coinciden en absoluto con los testigos judiciales.
El caso más notorio: la prensa ha presentado a Agnes Arabela Mureșan como siendo una menor con la cual Gregorian Bivolaru ha tenido una relación y ha salido al aire con todo tipo de testimonios, aunque en realidad Gregorian Bivolaru ha sido condenado sin pruebas (ya que la supuesta víctima niega el hecho y fue forzada violentamente a hacer esa declaración cuando tenía 17 años) por una supuesta relación con Mădălina Dumitru.
Otro caso, Cecilia Tiz, presunta “miembro de MISA que rompen silencio”, es un testigo al servicio de la prensa, que “rompe silencio” desde hace años en miles de artículos y post de Internet- en los cuales evita mencionar que de hecho es pagada por el SRI (servicios secretos rumanos) y que de hecho ha sido condenada en Alemania, por calumnias dirigidas sobre algunos yoguis.
En total, vemos sólo 2 a 3 testigos, pero estamos hablando de delitos y actos escandalosos que involucran a decenas o incluso cientos, miles. ¿Cómo es posible si estarían implicadas tantas personas, no haya pruebas y testigos?
No hay comentarios:
Publicar un comentario