Un nuevo ataque concertado contra el profesor de yoga Gregorian Bivolaru e indirectamente también contra la Escuela de Yoga MISA
El martes 28 de noviembre, las autoridades francesas lanzaron una operación a gran escala, similar al despliegue de fuerzas a gran escala en la "Operación Cristo" (como la llamaron incluso los fiscales) en marzo de 2004, cuando aproximadamente 200 fiscales, policías, Gendarmes, miembros de las fuerzas especiales, irrumpieron en 18 edificios en Bucarest habitados por practicantes de yoga. El objetivo de las autoridades francesas era el profesor de yoga Gregorian Bivolaru y la escuela de yoga de Francia. (Especificamos nuevamente que MISA organiza cursos de yoga únicamente en Rumanía, siendo la escuela de yoga en Francia una entidad independiente, con gestión y organización propia, aunque ambas forman parte de la Federación Internacional de Yoga y Meditación Atman, junto con otras escuelas de yoga del mundo). Las acusaciones absurdas difundidas por la prensa francesa y retomadas por la prensa rumana son similares a las de 2004 y se trata obviamente de temas con audiencia garantizada: violación, secuestro de personas, rapto, tráfico de seres humanos (más la acusación cómica y ridícula de "control mental ").
Le recordamos que el caso del Tribunal de Cluj en el que 21 practicantes de yoga fueron acusados injustamente de trata de personas se basó sólo en unas pocas declaraciones de algunas de las llamadas víctimas, que fueron amenazadas con ser acusadas o persuadidas por los fiscales para que firmaran algunas denuncias con la promesa de que de esta manera obtendrán enormes sumas en concepto de daño moral (la cantidad solicitada por los 12 "perjudicados" es de casi 6 millones de euros). En el proceso maratónico en el que los 21 yoguis fueron arrastrados por los tribunales durante 17 (!) años, no sólo fueron todos absueltos cuatro veces (tanto en el juicio sobre el fondo como en apelación, tanto en el primer ciclo procesal como en el el segundo), pero además el tribunal rechazó las solicitudes de daño moral para las denominadas personas perjudicadas. En otras palabras, los hechos de los que se acusaba a los yoguis no existen , a pesar del enorme esfuerzo realizado por las autoridades para demostrar su culpabilidad a toda costa. Sin embargo, los medios de comunicación se obstinaron en no ver la verdad.
Como en Rumanía se desmanteló la aberrante acusación de trata de personas y el intento de hacer pasar el trabajo voluntario realizado en los asentamientos espirituales con el trabajo forzoso o la trata de personas estaba condenado al fracaso, parece que el escenario se repite y se ponen en marcha los mismos mecanismos. en movimiento y en Francia. No conocemos los detalles del caso en Francia por el momento, pero vale la pena subrayar que, en Rumania, entre las decenas de practicantes de yoga en las casas registradas en marzo de 2004, ni uno solo (!) se quejó ante los " "liberadores" que habían sido traficados, explotados, abusados, sino que por el contrario todos presentaron denuncias contra los fiscales y gendarmes que llevaron a cabo los registros.
Como ya estamos acostumbrados, los medios de comunicación rumanos aprovechan esta nueva oportunidad para "desenterrar" entrevistas sensacionalistas de antiguos alumnos de MISA, personas sin escrúpulos, desesperadas por atención y dinero o motivadas por venganzas personales. Es curioso, sin embargo, que ningún periodista esté interesado en hablar con aquellos que fueron acosados por los fiscales durante 17 años (y que ahora están ganando demandas contra el Estado rumano ante el TEDH) o con aquellos que en aquel momento resistieron la presión del fiscales y se negó a firmar declaraciones incriminatorias para beneficiarse así de la falsa condición de "víctima". Además, sorprende también la falta de profesionalidad con la que algunos periodistas mezclan informaciones verdaderas con falsas, inventan acusaciones que en realidad nunca existieron, confunden datos y personas, con un total desinterés por informar correctamente al público y respetar la deontología profesional. La información es pública y fácil de verificar.
Consideramos necesario recordar que Gregorian Bivolaru ha sido blanco desde los años 1990 de campañas mediáticas de descrédito y calumnias apoyadas y alimentadas por las autoridades y el SRI (incluso ofreciendo documentos a los que teóricamente sólo tenía acceso la fiscalía), campañas a través de las cuales La opinión pública fue constantemente intoxicada, manipulada, incitada al odio e incluso linchada públicamente. Quienes lo conocen, sin embargo, saben que Gregorian Bivolaru siempre ha sido un modelo de verticalidad y nunca se ha desviado de sus principios espirituales. Creemos que la tenacidad con la que se persigue la demonización de Gregorian Bivolaru y el descrédito de MISA debería hacer reflexionar a quienes se preocupan por la verdad. También lo es el hecho de que esta escuela de yoga esotérico integral siga siendo la más grande de Europa, a pesar de los constantes ataques contra ella y la discriminación y persecución que aún enfrentan los practicantes de yoga MISA.
Dejando que la justicia francesa siga su curso, estamos convencidos de que al final la verdad también triunfará esta vez.
oficina de prensa de MISA
30 de noviembre de 2023
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